sábado, 2 de noviembre de 2013

El comienzo

Pues ya estoy en pleno viaje, llegado ayer a Sao Paulo. Hasta ahora, en día y medio puedo decir que las afirmaciones de que la ciudad no tiene tanto que ofrecer son ciertas, pero no la considero tan horrible como se dice por ahí. Es cierto que estéticamente es mejorable y que seguro otras urbes brasileñas son mucho mejores, no lo dudo. Pero las comparaciones son siempre odiosas, y como cada cual tiene su opinión, pues ahí queda eso. A partir de pasado mañana ya podré compararla con Rio de Janeiro.

El avión llegó ayer directo desde Barcelona a Sao Paulo, en un vuelo bastante correcto, con ligeras turbulencias, siendo curioso que las peores fueran cuando sobrevolamos Madrid, más o menos. Una vez pasadas las casi once horas de rigor el avión de Singapore Airlines llegó a tierra, y tocaba pasar el preceptivo control de pasaportes, ante la marida aviesa de la agente de la policía federal (como su homólogo de España, por cierto). No puedo hablar de todos los casos, desde luego, pero a las tres personas que hacemos el viaje juntos nos sellaron el pasaporte, sin mirarnos ni reservas de hotel, ni billete de salida, ni nada de nada. Ni una sola pregunta ni ningún comentario.

¡Por fin ya en Brasil!

La llegada fue cerca de las 17 de la tarde hora brasileña, así que entre recoger las mochilas, cambiar algo de dinero (como en todos los aeropuertos el timo estaba garantizado) y tomar algo, llegamos al hotel sobre las 20, atasco incluido. Cosa que por aquí se ve que es muy común y se dice que se están poniendo de moda los helicópteros taxi, sin duda un  nuevo concepto de transporte en una ciudad tan congestionada como esta. Después del preceptivo check-in, tocaba ir a comer algo y al ser el primer día pues tocaba comer en lo que estaba abierto. El tirar de supermercado a partir del día 2.

A pesar del colorido no es lo que pensáis, sino un hospital

Hablando del segundo día, nos levantamos temprano, y de camino a la Torre del Banespa (Banco del Estado de Sao Paulo, ahora propiedad del Santander, omnipresente en Sao Paulo), o Edificio Altino Arantes, construido en 1947 y que durante 9 años fue el edificio más alto de América Latina (y el segundo del mundo). La subida a su mirador es gratuita y espectacular aunque para alguien que sufre vértigo como yo no es muy recomendable. 

 
 Las espectaculares vistas desde el mirador de la Torre Banespa

Una vez bajados y tras la ardua tarea de intentar cambiar dinero en Sao Paulo (ahora ya sin tanto timo), el siguiente destino era el grandioso Parque de Ibirapuera, con su obelisco y lagos fantásticos, el pulmón verde de la ciudad, y donde comimos un pequeño snack para recuperar fuerzas a esas horas del mediodía. Continúo el tour por el parque y de nuevo a la carretera (al metro más bien), con destino ahora la Estación de Autobuses de Tietê, la más grande de América Latina y segunda más grande del mundo tras la de Nueva York, una verdadera y mastodóntica edificación que da servicio a casi toda Brasil y a varios países latinoamericanos.  Allí compramos el billete de tren hacia Rio de Janeiro para salir la noche siguiente. Nuestra primer movimiento tras la llegada al segundo destino del viaje.

¿La cola para El Hobbit?. No, para comprar un billete de metro.

De ahí ya al albergue, previo paso por el super para comprar algo de cenar, y a descansar para el día siguiente, ya nuestro último día en tierras paulistas. Por ahora no hay referencias cinéfilas, pero todo se andará...

Hasta las bocas de incendio tienen una sonrisa en Sao Paulo

Datos de interés:

Barcelona - Sao Paulo (vuelo directo con Singapore Airlines)
Salida 9:00 (hora española), llegada 17:10 (hora brasileña), tres horas menos en horario de invierno.
Salió un poco más tarde de las 9 y llego unos 20 minutos antes de las 17 en realidad.

Lime Time Hostels Rúa 13 de maio 1552 - Bela Vista, Sao Paulo
35 reales brasileños noche (11,5 euros + o -)
Metro línea 1 (azul), parada Vergueiro o línea 2 (verde) parada Brigadeiro
Billete sencillo 3 reales brasileños

Edificio Altino Arantes (Torre del Banespa)
Metro línea 1 (azul) parada Sao Bento

Parque de Iparabura
Metro línea 2 (verde) parada Brigadeiro
No sé si hay un sitio más cercano porque nosotros fuimos andando desde aquí, un buen trecho pero interesante.
 
Estación de autobuses Tietê
Metro línea 1 (azul) parada Portuguesa-Tietê

No hay comentarios:

Publicar un comentario